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Se estima que una PC desperdicia la mitad de la energía que consume. El otro 50% se pierde en forma de calor entre circuitos. Y es aquí, en el terreno de la eficiencia, donde los fabricantes se juegan tiempo, ingenio y dinero (mucho) para hallar alguna solución.
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Una de las consecuencias ha sido la creación de la organización Climate Savers Computing, conformada por ahora por 25 empresas (como Dell, Intel, IBM y HP), además de entidades varias. El objetivo es investigar cómo promover y lograr que la tecnología informática sea más respetuosa y cuidadosa del medio ambiente.

Pero no todo queda en manos de los fabricantes de equipos y partes de computación: también los usuarios tienen que poner su parte para lograr que una computadora consuma menos.

Como resultado de ese compromiso social se espera poder alcanzar una eficiencia energética del 90% para el año 2010. Por medio de Climate Savers Computing las empresas buscarán juntas dar con componentes electrónicos más eficaces y programas para administrar mejor el consumo de energía.

Si todas las computadoras pudieran tener una eficiencia del 90%, sería posible ahorrar 54 millones de toneladas de gases de efecto invernadero. El concepto de ahorro parece obvio, pero en el caso de la informática -de la electrónica en general- se trata de un cambio total de conceptos.

Hasta hace pocos años las empresas sólo pensaban en fabricar máquinas más potentes y rápidas, pero no se preocupaban de cuánta energía gastaban. El panorama cambió drásticamente, y ya no hay casi corporación alguna que no se haya anotado en la lista de las que "respetan y procuran cuidar el medio ambiente".

Qué pueden hacer los usuarios

Ahorrar energía, para los usuarios, no es algo tan difícil de lograr. Al menos, en lo que se refiere a pequeñas cuotas. Pueden recurrir a trucos tan sencillos como activar el salvapantallas, desenchufar el equipo de la red cada vez que se deja de utilizar.

En el caso de que el usuario haga una pausa corta en su trabajo, y esté seguro de que tan solo unos minutos más tarde va a seguir usándola, con el solo hecho de apagar el monitor ya estará ahorrando energía.

Los expertos recuerdan que es preciso acostumbrarse a apagar la computadora cuando no se la va a necesitar por un período de tiempo prolongado. Con esto no solo se ahorra energia, sino que además se la está protegiendo de las posibles subidas de voltaje y picos de corriente imprevistos que pueden, lisa y llanamente, matar al equipo.

Por otro lado, no conviene instalar una fuente de alimentación con una potencia superior a la que requiere la computadora que cada uno tenga.

Aún cuando parezcan poca cosa, los periféricos también consumen electricidad mientras están encendidos, de manera que lo mejor será apagarlos cuando no se estén empleando, ya sea que se trate de impresoras, escáneres, pantallas, cámaras.

Un detalle interesante es que las pantallas planas gastan menos, al igual que las tarjetas gráficas de dos dimensiones (cuando se las compara con las de 3D).

Otro método para evitar consumos altos de electricidad es el de los fondos negros. Consiste en utilizar aplicaciones con el fondo de pantalla oscuro y las letras blancas. Es un proyecto que da buenos resultados cuando el usuario se acostumbra a la nueva configuración de la pantalla.

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